domingo, 30 de diciembre de 2012

MODELISMO vs slot

Mantengo desde hace mucho tiempo la teoría de que el slot es el hermano sifilítico del MODELISMO amparándome en las muchas contradicciones que entre ambos mundos marcan una frontera de algo, que si bien entendido fuera, no debería andar tan desparejado. Y es que viendo lo que el modelismo como hobby significa, resulta en el slot la prostitución propia de sus principios convirtiendo sus productos finales a la comparación como aberrantes. Y entiéndase en todo momento esta reflexión enfocada al slot como producto final de un coche a escala, del trabajo realizado en el mismo y sobre el mismo. Dejemos al slot “de competición” para los campeones del mundo de su casa, que eso es harina de otro costal.

El MODELISMO, siempre con mayúsculas, desde su concepción no deja nunca de ser un pasatiempo, un hobby (anglicismo), donde el tiempo se invierte para gastarlo, pero para gastarlo pasándolo bien, distrayéndose, disfrutándolo, evadiéndose al fin y al cabo. En el slot, siempre con minúsculas, como buen bastardo, la concepción del mismo ha degenerado en un extraño Juego de Tronos, donde los egos y los negocios campan a sus anchas por encima del mero pasatiempo. Y esto siempre perjudicado por la cantidad de enfermedades venéreas que pululan por ahí infectando más la herida, es el caso de los palmeros (Lo aclararé en una próxima entrada al respecto).

El MODELISMO tiene como base la reproducción lo más exacta posible de un objeto real, y esto implica tratar de ser lo más fiel posible al objeto, lo más fiel posible a sus detalles, lo más fiel posible al estado real en un momento concreto del espacio y del tiempo, de sus tratamientos, de su deterioro, de su uso, o de su suciedad. En el slot nos encontramos por ahí gurús de chicha y nabo que sólo saben decorar carrocerías de coches recién salidos de fábrica, colores planos sin más, con flagrantes omisiones o detalles incorrectos, casi de cualquier manera que se diría. Y es que ser fiel a algo implica informarse, documentarse, y a veces adaptar lo que viene a lo que debe ser. Y si algo no existe se le fabrica, que ahí está la gracia. Luego uno se encuentra carrocerías de slot decoradas por ahí donde no se le ponen los escudos de Ferrari a un coche “porque no venían las calcas en el kit”, o sin algún patrocinador “porque total, en el coche nadie lo nota”. O más grave aún, con logos o patrocinios inconexos e incompatibles “porque el caso es que ponga algo en las ruedas, que a mi me gusta así” … aunque bien podría poner Hello Kitty, para el caso … Y es que esa expresión del “porque a mi me gusta así” es la que usa mi sobrino de cuatro años cuando pinta un “transformer” que se parece más a una patata. La razón de la sinrazón, o del orgullo propio mal entendido desde el ego de uno mismo. Algo que nunca ha tenido sitio en el MODELISMO. Yo por más que me esfuerzo no veo un Bf-109 con estrellas blancas de cinco puntas porque las cruces alemanas no me gustan, qué queréis que os diga, o sin ellas directamente porque no me venían las calcas.

Y es que en el MODELISMO supone una concatenación tautológica de conceptos, donde a los dos anteriores le sigue irremediablemente la autocrítica del MODELISTA (con mayúsculas, porque se lo merece), el afán de superación, y de llegar en cada maqueta un poquito más lejos que la anterior. Aparentemente poquito, pero basta mirar hacia atrás descontándose diez para ver la mejora con nitidez. En el slot no. En el slot se estanca uno en los colores planos (los muy buenos tres o más), dominar (ejém, ejém, …) la técnica del barniz bicomponente, más o menos habilidad con las calcas, y los pata negra ya hasta con las líneas de los panelados. Pero no busque más que ya no hay. Que de ahí no se pasa y ni de lejos se le llega.

En el MODELISMO se le da a la pieza el valor real que tiene, y que no es más que un “cacho de plástico” pintado, en palabras de Mig Jiménez, palabras que comparto plenamente. Y que no debe tener valor, ya que es una cosa hecha desde la afición, para la afición de uno mismo y por la afición del propio. Que en el slot no, que ya lo sabemos, que leyendo los foros cada coche es una auténtica obra de arte, de valor éste o aquel porque lo ha pintado o lo ha fabricado “el Crupiere” o “MenganiToys”. Porque la filosofía de Mig Jiménez tiene mucho que ver con la desposesión de las maquetas que uno hace, porque una vez terminadas habrá quien las disfrute mirando, pero no quien la ha hecho que la ha disfrutado haciéndola. El corsario del slot disfruta acaparando, cuantas más mejor. Quiero, quiero, quiero, y quiero. Y tengo más. Mucho. Muchísimo. Tengo más Le Mans que tú y que nadie … Pero de una calidad muy mediocre. Bueno, mediocre no, paupérrimo. Porque siempre he sido de la opinión que es mejor una buena maqueta al año, pero buena, de calidad, en la medida de las posibilidades de cada uno, que treinta coches de slot que solo valen para deslumbrar a las visitas en casa, pero a esas visitas que vienen con los sobrino y que el único coche que ven al año es su utilitario de más de 10 años. Y que al final, si presentas tus treinta coches a cualquier concurso serio, de MODELISMO, acaban siendo el relleno perfecto que da pie a entradas como esta, pero “In Real 3D”. Tampoco entiendo muy bien esa actitud tipo “Gollum” de tener la mayor colección o producir como churros cualquier cosa porque el caso es tener algo nuevo que enseñar todas las semanas. Esto último es un síntoma de un vacío que el usuario del slot trata de llenar con objetos. Cantidad que no calidad.

Y todo esto si no nos tiramos de cabeza a la piscina de las comparaciones en la relación calidad/precio, o en la escala. Las imágenes que acompañan a esta entrada se corresponden a una maqueta a escala 1:72. Y puede comprobarse la definición que muestra, los panelados, los remaches, los detalles, la finura de las líneas que lo componen, … Apenas 8 euros costó, y si metemos la parte proporcional de pinturas, barnices, óleos, pigmentos, cinta de enmascarar, o la base expositora realizada totalmente a “Scratch”, dudo que se alcancen los 10 euritos para redondear. Ahora nos vamos al slot … 44 euros el plástico del chino de “ManguiToys”, con una definición deleznable a escala 1:32 (el doble), pintado de aquella manera, y con suerte, con la huella dactilar del operario perpetuada en el barniz. Y no me vale la excusa de de que por ser de slot tiene que llevar mecánica y eso encarece el coche … que las piececitas móviles no alcanzan en precio los 15 euros … Es decir, 29 euros el juguete para adultos. Tiene delito, oiga. Y mucho ojo, no se malinterprete esto, porque no estoy comparando precisamente con productos de resinas artesanales, y es que yo soy el primero que le da el valor que tiene a algo que se fabrica por uno mismo, y no entro a discutir si vale más o menos de 150 euros. Cada uno le da el valor que considera, y luego está quien lo paga o quien no. Pero lo que no tiene sentido alguno es que nos encontremos diferencias tan exageradas de calidad entre dos objetos de plástico fabricados industrialmente.

Si alguno tiene dudas o discrepa sobre lo que hasta ahora llevo expuesto no tiene más que acercarse a un par de certámenes de MODELISMO y autoanalizarse viendo lo que se ve allí. Yo no sabría poner precio a la mayoría de las maquetas que allí se ven, posiblemente serían escandalosamente caras para la mayoría de los bolsillos. Las razones son obvias. Solo en trabajo, técnicas aplicadas, materiales, y habilidad demostradas, dejan a la altura del betún a cualquier carrocería decorada por “Paquito el Crupiere” o cualquier otro. Pero vamos, es que de entrada ya ha usado un pincel … que en el slot ni se conoce el artefacto. Porque al final, solo importa que brille mucho. Lo demás da igual, si lo condujo Röhl o Roehl, si era azul o rosa. Lo que importa es lo que dicen cuatro que marcan tendencias, y que la masa en plan “Fuenteovejuna” sigue sin cuestionarse nada. Porque para cuestionarse algo hay que tener tiempo y emplearlo buscando, documentándose y comparando. Pero la masa cree que es mejor emplear ese tiempo acaparando más y más. Llenando vacíos con incontables piezas que ni en diez vidas puedes disfrutar. Como los piratas, vamos.
Y mientras os he aderezado la entrada con una vuelta al origen de esas que de vez en cuando me gusta hacer. Porque como las buenas dietas, en la variedad está el gusto. Un North American Texan T6-G del Ejército del Aire Español (EdA). En esta ocasión representando un aparato real y operativo en la Base Aérea de Getafe durante 1963. Estacionado en su la pista de aparcamiento. Sirviendo de entrenador básico para la formación de los pilotos del EdA durante más de cuarenta años, además de otras unidades operativas con otras funciones en el territorio nacional. Siempre con el característico color “pollito”. Tratando de representar sobre él, el desgaste propio del uso, los materiales que se descubren por el deterioro, el envejecimiento del esquema de pintura, la climatología, y algo de detallado extra. Un toque personal a un avión de 8 euros. Y por supuesto, una base donde este avión toma vida y sentido. De lo que forma parte y cobra significado. Una porción de Getafe en el año 63.

Y es que esto al final es MODELISMO... ¿y si le ponemos unos Hello Kitty en las rueditas?

Feliz Año

 Miguel

8 comentarios:

mikius dijo...

No podría estar más de acuerdo con tu exposición.Pero también decirte que el nivel de exigencia en un modelo de slot no se puede comparar al Modelismo con mayúsculas son dos mundos o hobbies bien distintos por lo menos para mi.Conozco muy pocos que le den un acabado modélico y con toda su fidelidad a un coche de slot,que se podría lograr....Si,pero eso es un tiempo y un esfuerzo por lo que no todos se sacrifican. Saludos

Miguel Angel dijo...

Ciertamente, Mikius, son dos hobbies que han seguido caminos distintos pero que comparten una raíz común en su nacimiento. El debate, o la autocrítica, que quiero provocar en cierto modo con esta entrada radica en conceptos básicos de ambos como la calidad de fabricación de un simple plástico, o la tendencia generalizada que comienza a verse en el slot por la que "todo vale" aunque sea "de aquella manera" llegándose a cometer flagrantes errores en las reproducciones ante la pasividad del aficionado. Tengo por ahí un Mitsubishi Lancer del Dakar, de esos que sacó Avant Slot a casi 50 euros, que cada vez que lo miro me chirrían los dientes. Sobre el acabado modélico yo creo que se puede, ¿a qué precio? al que cada uno esté dispuesto a "pagar", eso sí, siempre que el producto base destile calidad para poder aprovecharla. Un fuerte abrazo y Feliz Año, Mikius.

mikius dijo...

Estamos de acuerdo Miguel Angel,reconozco que parte de mi abandono del hobbie es debido al motivo que expones.Un abrazo y Feliz Año también,espero seguir tu blog que me parece de lo más interesante.

Daniel Diedrich dijo...

Hola a ambos:
Miguel, para mí tus palabras son indiscutibles con una salvedad, yo creo que el origen de ambas aficiones no es el mismo. Mientras que uno, el slot, tiene su origen en dar vueltas a una máquina eléctrica en miniatura en un circuito con una ranura, en el otro hobby, el modelismo, su origen siempre fue lograr la mayor definición a escala de un objeto real. Mientras que el primero siempre fue un juguete, el segundo nació como afición de adultos. Con cinco años recibí mi primer exin y con doce mal-construí mi primer Stuka. El exin se aproximaba a una realidad, pero primaba su origen, es/era un juguete, mientras que el modelismo es algo bastante más serio... Esta dualidad se mantiene incluso en el coleccionismo, nunca encontraremos un coleccionista de maquetas de los 80 por el mero hecho de que las de ahora son mejores, pero si encontraremos un coleccionista que solicita a un buen modelista una determinada figura. En el Slot encontramos un primer coleccionismo como un fenómeno de masas que intenta recuperar parte de su infancia, es el "enfermo del exin" que con o sin hongos está prendado de un juguete que para mí se podría considerar coleccionismo de juguete antiguo. El debate creo que se planteó cuando tras la "revolución" estética de Fly, y la "especialización" de los "profesionales del gatillo" el Slot comenzó a definirse en submundos "enfermos" que se intentaban codear con el hobby de adultos. La "revelación" de que el "slot no es un juguete" es una cosa muy reciente (15 años). Si a eso le mezclamos dosis de especulación, falta de rigor y en muchos casos engaño económico a parte de una incultura automovilística general del comprador, que no sabe si compra un juguete eléctrico o un coche que corrió Le Mans, pues que queréis que os diga. Las diversas variedades de la enfermedad son muchas, los exineros, los flyeros, los Slotclasiqueros, los... ¡Como se puedo llegar a pagar hasta 6000 euros por un coche de slot! Síntomas de un hoby enfermo hace mucho timepo. Coincido con Mikius, en que otro de los factores de alteración es el tiempo. Mira que habremos visto modelos a escala en Euromodelismo, donde el modelista comenta que el diorama o el modelo en cuestión le llevó dos años. Comparar eso con el churrero que realiza una resina por semana para llenar el foro o el blog... es un insulto al primero. En el Slot nadie se sacrifica, y si lo hace, es mediante un Chino de la China.¡todavía tengo en caja un Stuka de Hasegawa con sus fotograbados para montar! y hasta que mis nenes no tengan una década se quedará en su caja. Tiempo, bendito tesoro.
PD: La semana pasada me repuse al comteplar el Porsche de una nueva marca de Slot con pilotos que tienen cinturones independientes realizados con fotograbados...hasta que contemplé la cara del piloto...un poema al espanto.
Saludos y feliz añoa a ambos.

Miguel Angel dijo...

Cuando me refiero a un origen común estoy hablando de la manufactura de las bases, de los plásticos, de su origen industrial, de su escala, de sus detalles ¿acordes con ésta?. Del resto obviamente no disponen de más patrones comunes ya que poco elemento que decora coches de slot conoce el pincel ... Y sin embargo dominan la gama de sprays de Duplicolor e incluso aleccionan sobre los tonos correctos ... cuando me gustaría ver a alguno aplicando sus sapiencias sobre su utilitario a 1:1.

samjack dijo...

En el fondo lo que haces en este artículo es dar cera al aficionado de slot que pinta sus modelos (o los de otros) y felizmente los enseña en un foro para que todo el mundo le anime y siga pintando coches... A ver si cuando lleve cien carrocerías por fin le queda una decente. Y eso esta un poco feo. Es una comparación bastante injusta. Por eso no publicas esto en un foro... y ni se te ocurra jeje...

He practicado el modelismo antes que el slot. Y cuando pinto un coche de slot cambio el chip ¿Por qué? Pues porque no es lo mismo y no busco el mismo fin. Pinto un coche de slot pensando que tiene que verse bien de lejos sobre una pista oscura, tiene que diferenciarse y notarse que es mi coche aunque otro lleve los mismos patrocinadores que el mio, tiene que ser resistente a dolorosos impactos, etc... sería guay envejecerlos o desgastarlos. Pero ¿Para qué? Si al primer rasponazo se le irá esa capa mate de polvo, o pincel seco y ya no parecerá realista ¿Para que voy a resaltar un panelado tan fuera de escala? ¿Para que voy a añadir piecitas mas detalladas si luego no me dejarán correr con ellas, o van a salir disparadas a la primera salida?

Desde luego está claro que te ponen enfermo esos aficionados de slot que pintan sus coches y se lo pasan pipa. Pero déjales, hombre, que pinten y jueguen luego con ellos, que para eso son.
Ya quisiera yo poder disfrutar de mis aviones y blindados después de pintarlos como lo hago con mis coches de slot.

Miguel Angel dijo...

Considero que el sentido de la entrada es bastante más amplia que el matiz sobre el que te centras, Samjack,aunque no quita que también lo incluya en el lota completo. Independientemente de una pieza para correr o un estático en kit, el plastiquito final que me mandan desde la fabrica de China bajo patente alemana no tiene la calidad ni de lejos similar en ambos casos ... ¡¡¡ni proveniendo de la misma marca en los dos casos!!! Y si encima comparamos los precios de uno y otro ... Todavía estoy esperando a que alguien sea capaz de explicarme argumentándome coherentemente las razones.
Por otro lado, yo, desde mi formación profesional y como persona, no puedo decir que algo es bueno cuando es una m...a. Y de hecho, soy el primero en saber cuando hago una m...a, que las hago. La lástima de todo esto, es que en el slot, todo es una maravilla, cuando ni de lejos lo es, y ése es el hecho que critico. Que velamos la realidad en un halo "disney" de maravillosidad cuando olvidamos que todo lo que se publica queda expuesto a cualquier crítica, buena o mala. Cuando caemos en el error de no criticar las cosas, siempre constructivamente, por compasión lo que hacemos es caer en un acto de hipocresía y le hacemos un flaco favor, puesto que nunca mejorará, ni con 100 ni con 200. Y eso es el día a día de los foros de slot, de los que hace mucho tiempo que huyo como de la peste, puesto que no hay más que ver cómo se regalan las portadas.
Y si un coche es para correr y por eso no lo detallo, me pregunto ... ¿no es mejor pintarlos diréctamente por inmersión en un bote de Titanlux?
Yo detallo mis coches al máximo de acuerdo al uso que van a recibir, incluso los de la pista, y eso hace que me jacte (lo reconozco) de poner el coche en pista más espectacular de toda competición en la que he participado. Y me divierto con él. Porque me he divertido haciéndolo. Me he divertido pintándolo. Me he dibvertido corriendo con él. Y hasta me he divertido saltándole las piezas cuando mi torpeza al mando me ha llevado a provocar un accidente. Porque al final es "un cacho de plástico". Y tampoco hay que sobravalorarlo más de lo que es.
Muchas gracias por pasarte y opinar, porque eso es lo que se buscaba con esta entrada Sam.
Feliz Año.

samjack dijo...

Por cierto, se me olvidó decirte que aún estoy flipado con el dato de la escala de este avión. Viendo las fotos no doy crédito.

Pero ¿Cómo no voy a participar, si tu artículo pide participación a gritos?
También capté el otro sentido del artículo, pero tampoco comparto tu punto de vista. Y bueno, con responder a un punto por comentario ya es bastante para no liarse.

Siendo profe (o relacionándote con otros humanos) te das cuenta de que resulta mas provechoso para todos reforzar positivamente cualquier atisbo de motivación. Y si un tío presenta un coche que da pena y te explica que es su primer coche y le ha llevado un mes, no puedes decirle que se corte las manos y se arranque los ojos (no en ese orden, claro) para impedir vuelva a dejar una carrocería así. Nop, eso no es bueno para el hobby, ni para hacer amistades.
Me parece de lo mas normal que los foros estén llenos de gente de empieza haciendo churros y poco a poco va mejorando gracias a los ánimos y consejos de otros foreros. Pero vamos, que en un foro de modelismo se ven casos similares.

Y en cuanto al otro punto, el de la calidad de los modelos de slot como modelos a escala, también me parece una comparación injusta.
Si una maqueta no busca una fidelidad milimétrica en su reproducción a escala no tiene razón de ser o parecerá un juguete. Pero creo ver una diferencia razonable entre un juguete y una maqueta.
En el caso de los coches de slot resulta que se trata de juguetes. Y del mismo modo que una Barbie no es una maqueta escala de una rubia, un coche de slot tampoco es una reproducción milimétrica a escala de un coche. Por eso los sloteros, que son conscientes de este hecho, no se hacen mala sangre cuando ven estos juguetes tan deformes, caros y mal reproducidos. Y en cambio flipan cuando ven carrocerías muy detalladas, como las de Fly, Superslot, etc. Incluso llegan a babear con las resinas de algunas marcas, que son lo mas parecido a una maqueta a escala y lo menos parecido a un coche de slot. A ver quien se compra una resina para destrozarla en la pista...

Y como creo que ya he expuesto claramente mi opinión encontrada, aquí lo dejo, porque los comentarios ya abultan mas que el propio artículo y me da un poco de vergüenza robarle el protagonismo a ese pedazo avión. Pero que conste que la culpa es tuya, Miguel, por poner fotos de un avión y escribir sobre slot.